EL ENCANTO DE LA MUJER MADURA

EL ENCANTO DE LA MUJER MADURA

Estaba repasando las fotos que ha dejado tras de sí la última edición del Festival de Cine de Cannes, y he visto que, más que en otras ocasiones, sobre la alfombra roja, además de desfilar las actrices más jóvenes, la han pisado un buen número de mujeres maduras. Con este calificativo, madura, todo el mundo entiende que estamos hablando de mujeres que han pasado la barrera de los cuarenta o cincuenta años.

Y me he dedicado a buscar sinónimos de madura, son estos: adulta, desarrollada, formada, hecha, juiciosa, sensata…

Me he mirado las fotos de estas mujeres, espléndidamente vestidas, y no me he fijado en quien había diseñado sus vestidos. Me he fijado en ellas. Y he visto que la gran mayoría de ellas poseían un encanto especial.

Es verdad, que como actrices que son en su mayoría, han vivido muy pendientes de su físico, y posiblemente, hayan pasado por quirófano para corregir las señales que la edad ha dejado en ellas, pero la expresión de sus ojos, su porte, su manera de estar reflejan precisamente que son mujeres seguras de sí mismas, porque han madurado, se han desarrollado como personas y eso las hace mejores y más bellas de lo que ya lo son si cabe.

Ellas son un tipo particular de mujer, cada una de ellas ha vivido con una cámara que registraba cada gesto, cada expresión, y eso es una presión dificil de soportar en un mundo en el que parece que sólo la juventud pueda ser bella, por eso tal vez hayan cometido esos errores garrafales al someterse a intervenciones o tratamientos que no las han favorecido en absoluto. El ejemplo de Nicole Kidman (46 años) es bien patente, cuando ha abandonado el uso y el abuso del botox, su expresión ha dejado de ser la de una muñeca de cera, y está mucho mas bella, natural, y sigue siendo guapísima.

He querido poner la foto de Sharon Stone, con 55 años, en la cabecera, porque me gustan sus arrugas, como las que puede tener cualquier otra mujer de su edad, porque creo que si bien hay que cuidarse, no hay que vivir queriendo ser quien ya no se es. Los veinte, los treinta han pasado, y nadie dice que las próximas décadas ya no resulten atractivas.

Cambiará el físico, pero el mayor y mejor cambio se produce en el interior de cada mujer, y hay que ser muy mujer para ser madura con todas las consecuencias, para ser sensata, hecha, juiciosa, adulta y desarrollada. Sólo las auténticas mujeres lo consiguen, sólo las mujeres de verdad alcanzan la madurez conservando y aumentando todo su encanto.

Vamos a ver el encanto de la mujer madura en estas mujeres famosas, pero nuestras calles están llenas de mujeres que ya no son jóvenes, mujeres maduras llenas de encanto.

Nicole Kidman, 46 años